Debo comentarle que últimamente los bichos que habitaban en mi han por completo desaparecido, convirtiéndose en flores que alternan los colores mas brillantes que pueden mientras se le dibujan caritas felices entre sus pétalos.
Sí, señor es debido a usted y a su cercanía-lejana que esto sucede. Lo veo descubrirme, lo veo pensarme y es desde ahora mi actividad favorita correr en su cerebro ida y vuelta 27 veces por día, sin cansarme en lo absoluto.
Debo confesarle que para mí fue de lo mas emocionante coincidir con su persona en el río, las amarillentas hojas de mi libro se mezclaron solas y no paraban de reírse de lo dulces que mis ojos se veían al momento de descubrir los suyos, que no hacían mas que luchar en profundidad con el propio río, marrón y azul, peleando hasta el infinito, solo eso quiero ver hasta el resto de mis días.
Lo esperare señor, lo esperare sentada en el subte línea B, mirando por las ventanas mientras intento saber si en algún momento ese obscuro túnel se puede llegar a iluminar de un color celeste muy claro, para luego pasar a un verde y después a un amarillito pastel.
Es todo cuanto debo informar.
Sadie.-
Pd.: No, definitivamente nunca voy a saber si el perro de la esquina me ladra por algo que ya podríamos decir es personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario